Un astronauta y una bruja viajan en una burbuja derechito para el
sol, ese fuego que
creció. Si se calienta el detergente y revienta eso que sienten pueden
perder el control y
también la
conexión certidumbre o ilación,
epidérmica ficción.
El cree en naves espaciales y en efecto especiales que nunca verifico, que en
su puta vida vio....
Ella practica con escobas, ve el futuro en una bola que un colgado le
vendió y
también la
convenció de
su poder interior, esa
magia de
cartón .
En el Aire
ruegan gotas de
AMOR, gotas de AMOR.
El vago juega con la idea de crear
un gran sistema que permita
otra función, otro
tipo de valor pero la bruja lo contiene y adivina lo que quiere, porque ella fue y
volvió al infierno del terror a ese mundo tan
glotón que te come el
CORAZÓN. A veces pasa que la fiebre sube
mi
st
er
io
sa
me
nt
e y se retira
SIN razón,
como toda aparición.
Una burbuja reventada ya no se significa nada y abatidos van los dos
sin creencia o religión, alejándose del sol en
opuesta dirección.Un
retorno eterno al
vació, al
vació ... un
retorno eterno al
vació,
VACÍOS!
Nunca
la vida es tan
precisa , nadie
tiene esa fija que te saca del montón y te muestra
algo mejor. Ni el astronauta ni la bruja saben que hacer con la culpa y el miedo que les dejo su sideral
desconexión .
Y en el aire ruegan gotas de amor...
GOTAS DE
AMOR.